Un sacerdote,(una gran persona por cierto) me encargó este retrato de la Virgen María con su madre, Santa Ana y en realidad son dos retratos en uno.
Este retrato tuvo una dificultad tremenda, sobre todo en el tamaño de las caras que tenían 5 por 3 centímetros,la cara de Santa Ana y 3 por 2 centímetros en el caso de la Virgen, lo cuál complica mucho el trabajo, por pintar en tan poco espacio.Otra complicación fue la cantidad tan grande de adornos y demás detalles que tienen las ropas y las coronas de la Virgen y su madre.
Aquí les dejo algunas imágenes de este retrato.
Este retrato tuvo una dificultad tremenda, sobre todo en el tamaño de las caras que tenían 5 por 3 centímetros,la cara de Santa Ana y 3 por 2 centímetros en el caso de la Virgen, lo cuál complica mucho el trabajo, por pintar en tan poco espacio.Otra complicación fue la cantidad tan grande de adornos y demás detalles que tienen las ropas y las coronas de la Virgen y su madre.
Aquí les dejo algunas imágenes de este retrato.